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Por qué Encanto NO es realismo mágico
El pasado 8 de febrero fueron anunciadas las nominaciones a los premios Oscar y Encanto ha conseguido tres nominaciones por “Mejor película animada”, “Mejor canción original” y “Mejor banda sonora”. Dichas noticias nos han animado a revisitar la película y comentarles lo que la hace tan especial.
Introducción
En Encanto seguimos la historia de la familia Madrigal y los dones mágicos que les fueron concedidos después de que la abuela Alma y el abuelo Pedro escaparan de su pueblo natal para proteger a su familia.
Sin embargo, la magia de la familia peligra. Mirabel, la única Madrigal sin don mágico, ve cómo la Casita empieza a derrumbarse y se enfoca en salvar la magia para luego descubrir que lo que en realidad debe salvar son los lazos familiares.
Ya que la película está basada en Colombia, los productores desearon realizar homenaje a dicha tierra a través de representaciones visuales y narrativas.
Una de dichas referencias es, claramente, a la obra Cien años de soledad del reconocido Gabriel García Márquez, en la que presenciamos la historia, con todos sus altos y bajos, de la familia Buendía.
Las diferentes referencias como las mariposas amarillas, el sistema matriarcal de la familia, la casa y la locación del pueblo son pequeños detalles superficiales que conectan ambas obras. En un nivel narrativo más profundo, el trauma generacional recorre la espina dorsal de ambas narraciones.
Debido a esto, muchos han considerado que Encanto es un reflejo más del realismo mágico que recorre la obra de García Márquez, pero queremos jugar al abogado del diablo. ¿Qué pasa si les decimos que ni Encanto, ni Cien años de soledad son realismo mágico?
realismo mágico?
El realismo mágico es usualmente caracterizado por tomar elementos mundanos y verlos como algo maravilloso. Pero el término es utilizado por primera vez en Europa cuando el alemán Franz Roh lo utiliza para describir una pintura de 1925.
Posteriormente, pasó a ser usado por críticos estadounidenses para referirse precisamente a ese “boom” de escritores latinos del siglo XX y se convirtió en el término con el que se tiende a describir, de forma muy general, toda la producción que sale de latinoamérica.
Pero hay otra propuesta que existe y que muy pocos conocen: lo real maravilloso. La primera vez que este término aparece es en el prólogo de Alejo Carpentier a su libro El reino de este mundo que más tarde fue ampliado y publicado como ensayo bajo el nombre De lo real maravilloso americano.
Lo real maravilloso también retoma esta idea de mostrar lo maravilloso como algo mundano y lo mundano como algo maravilloso, pero esto se utiliza especialmente para contar la realidad única de latinoamérica. Lo que Carpentier plantea en este texto es revisar lo real maravilloso como una categoría que sirve
para describir un fenómeno cultural que estaba ocurriendo en la periferia y que las producciones que salgan de dicho fenómeno no se relacionan directamente con los modelos europeos como era costumbre.
realismo mágico
Empecemos con Encanto. La aparición de la magia no parece ser sorprendente y los motivos de su aparición, aunque ligados a la muerte del abuelo Pedro, no tiene una explicación lógica. Si lo vemos desde una perspectiva común donde el realismo mágico está definido por normalizar lo fantástico en el mundo real, la película haría parte del movimiento.
Pero si aplicamos la misma lógica a otras producciones ¿no sería La forma del agua de Guillermo del Toro o La metamorfosis de Franz Kafka parte del realismo mágico? En ambas narraciones la presencia de lo mágico (un monstruo marino y un hombre que se convierte en cucaracha) no es explicada.
La realidad es que no hay una forma (o fórmula) para escribir realismo mágico. Lo que Disney realiza en Encanto con dichos elementos fantasiosos es tratarlos como tal: como una trama fantástica. Y esto no es algo que desmerite la historia. Disney es familiar con el género y lo utiliza ingeniosamente para resolver el trauma generacional de la historia.
Teniendo esto en cuenta, Cien años de soledad tampoco sería partícipe del realismo mágico. ¿De lo real maravilloso? Definitivamente. En su narración se construye un lugar de enunciación que se enfoca en lo propio, en la cultura de la región.
Se narra desde la particular experiencia latinoamericana su forma de percibir el mundo. Así que no parece justo encasillarlo en un término que nació principalmente en Europa.
y la fantasía
La principal propuesta que se busca con lo real maravilloso es abrir la posibilidad de pensar globalmente desde la periferia. Esto incluye las experiencias propias de la región, sus misticismos, sus tradiciones, etc… y, de paso, romper con las influencias europeas.
Esto es algo que se encuentra en Cien años de soledad, pero no es algo que se desarrolle en Encanto. Lo que sí hay es una brillante exploración del trauma generacional a través de la fantasía. Utilizan la magia como un elemento principal en la vida de los personajes que oculta las heridas familiares que, al final de la narración, se convierten en el elemento principal mientras la magia queda relegada a una posición secundaria.
Escrito por
Salomé Rodríguez Pérez